Con 14 profesores de artes visuales beneficiados en el norte de Chile
culmina el programa “Entre la forma y el molde”
· 14 profesores y talleristas de artes visuales del norte de Chile fueron beneficiados con el programa Entre la forma y el molde que se realizó de abril a julio en el Instituto Superior Latinoamericano de Arte, ISLA, de Antofagasta, con talleres de actualización en arte y creatividad. Como monitores, estuvieron a cargo artistas relevantes de la escena actual provenientes de distintas ciudades del país: Cristóbal León, Catalina Correa, Francisco Bruna, Julio Morales, Gonzalo Cueto y Dagmara Wyskiel.
· El proyecto del Colectivo SE VENDE dio continuidad a la 4ª Semana de Arte Contemporáneo, SACO4, que en 2015 estuvo dedicada a la educación artística, beneficiando a 82 estudiantes de enseñanza media de Arica a Vallenar.
El fin de semana pasado culminaron los talleres de actualización y estimulación creativa para profesores de artes visuales de la región de Antofagasta, que conformaron el Programa Entre la Forma y el Molde. De abril a julio y cada fin de semana, las actividades fueron encabezadas por seis monitores, artistas relevantes de la escena nacional: Cristóbal León y Catalina Correa de Santiago, Francisco Bruna de Concepción, Gonzalo Cueto de Temuco, más Julio Morales y Dagmara Wyskiel de Antofagasta; mientras los alumnos provenían tanto de esta ciudad como de Mejillones, Tocopilla y San Pedro de Atacama, tratándose de 14 profesores de liceos y colegios municipalizados y particulares subvencionados, así como talleristas que representaban distintas maneras de docencia artística.
Con el énfasis en nuevos lenguajes y la necesidad de estimular la creatividad en el aula, el programa buscó actualizar los conocimientos relacionados con arte contemporáneo en quienes trabajan directamente con los jóvenes en la región de Antofagasta. Fueron seis líneas temáticas o lenguajes (land art, videocreación, arte y espacio exterior, redes sociales, objeto cotidiano y stop motion), dictadas sucesivamente los sábados y domingos.
REACTIVAR CONOCIMIENTOS
Uno de los participantes, Patricio Chávez, asistió a todos los talleres, viendo en ellos “la oportunidad de aprender con grandes exponentes en sus áreas del arte contemporáneo”. El artista y gestor cultural –que hace clases en talleres, programas educativos y establecimientos educacionales de Tocopilla– destacó además la posibilidad de tener un espacio de aprendizaje en el norte de Chile. “Me ha servido para aprender a hacer redes y seguir adquiriendo conocimientos sobre el arte, para potenciar mi trabajo en las aulas y seguir estudiando”, agregó.
Benjamín Quezada también participó en todos los talleres, relevando “la variedad y calidad humana de los profesionales de nuestra región, también la clara necesidad de instancias como ésta”. Para el profesor del Liceo Likan Antai C-30 de San Pedro de Atacama, fue también importante “conocer artistas de la región y reactivar conocimientos e integrar cosas nuevas a la materia gris”.
Mientras que, para los monitores, el programa fue una ventana que los sumergió en algunas experiencias de artes visuales del norte chileno. A Catalina Correa, por ejemplo, que centró su taller en procesos de investigación artística, le llama la atención “la heterogeneidad de backgrounds” que siempre encuentra en regiones, “lo que hace que el taller sea mucho más rico. Interesante observar también los vínculos directos del quehacer artístico con el paisaje natural y humano que habitan, el compromiso que mantienen en general con la situación de mixtura social que desde hace algunos años se está viviendo en Antofagasta, o con el antiguo problema de la contaminación”.
Para Cristóbal León, que trabajó con stop motion, fue significativo acercarse a procesos de la escena artística de Antofagasta en gestación. “Me interesa ver distintas estrategias de gestión cultural, por ejemplo, las del colectivo Resilientes, al que algunos participantes pertenecen, que utiliza las calles para exhibir fotografías ante la ausencia de espacios expositivos. También me llamó la atención el esfuerzo de algunos por llegar al taller. Algunos trabajan de noche y llegaban sin haber dormido. Otros venían de otras ciudades por el fin de semana dejando a sus familias”, recalcó.
CIRCULACIÓN DE CONTENIDOS
El interés del programa Entre la Forma y el Molde fue además plantear propuestas prácticas para ser recopiladas, editadas e impresas en cuadernillos, y entregadas a colegios de la región. De esta manera, los ejercicios firmados con el nombre y apellido de cada profesor o tallerista, circularán a través de los docentes y servirán directamente en el aula.
“No está a nuestro alcance cambiar el sistema educativo y poner el arte en el lugar que estamos convencidos se merece, ni asegurar su presencia en el desarrollo de cada ser humano. Lo que proponemos es aprovechar al máximo el espacio de creatividad que nos queda en el programa de educación formal existente y con esto aportar a la calidad docente de los profesores de arte de la región de Antofagasta”, aseguran los gestores, Dagmara Wyskiel y Christian Núñez, del colectivo SE VENDE.
El programa fue una primera actividad del ISLA (Instituto Superior Latinoamericano de Arte y Centro de Residencias), inaugurado en marzo de este año en el sector Playa Blanca de Antofagasta. Los talleres dieron además continuidad a la 4ª Semana de Arte Contemporáneo de Antofagasta, SACO4, realizada entre agosto y septiembre de 2015, y que estuvo dedicada a la educación artística, con la participación de artistas-docentes provenientes de Latinoamérica que vivieron cinco intensos días de talleres de arte con más de 80 alumnos de enseñanza media provenientes de ciudades del norte grande. El foco ahora estuvo puesto en los profesores de esos alumnos.
“Estamos impresionados como equipo de ISLA por el compromiso y la constancia del grupo. La necesidad de aprender, la voluntad de crecer y profesionalizar su quehacer artístico y docente es latente en la región. Motivados con el feedback, doblaremos los esfuerzos para poder ofrecer más instancias de este perfil. Las inscripciones para Laboratorios de Primavera Desiertos Intervenidos - tres residencias de investigación y creación en asentamientos ancestrales, ya están abiertas”, invita SE VENDE.
El proyecto, inédito en el norte de Chile, consistirá en tres módulos intensivos de laboratorios de investigación artística, de una semana de duración cada uno, dictados por tres creadores reconocidos internacionalmente para artistas locales. Cada módulo estará a cargo de Bogdan Achimescu, Guisela Munita y Víctor Hugo Bravo, respectivamente, en septiembre, octubre y noviembre, enfocándose en las localidades de Ayquina, Quillagua y Paposo.